Si has llegado hasta aquí es muy probable que tengas miedo a hablar en público. Lee las siguientes situaciones y piensa si te has enfrentado alguna vez a alguna de ellas.
Estás en tu primer año de universidad y tienes que presentar en grupo un trabajo delante de tus compañeros y tu profesor.
Has terminado el Máster y debes defender tu TFM (trabajo fin de máster) ante el tribunal dentro de un mes.
Llevas dos años haciendo un doctorado, hay un congreso y en el departamento te han propuesto realizar una comunicación en inglés sobre vuestra investigación, estarán los mayores expertos en la materia.
Eres profesora de primaria, das clase a diario y te sientes cómoda con tus alumnos. Además de las clases, todas las semanas tienes que participar en la reunión de profesores y también organizar tutorías con grupos de padres.
Te han ascendido en la empresa, no solías tener dificultades en reuniones de trabajo cuando erais pocas personas. Ahora es diferente, debes dirigir tú las reuniones y tu nuevo equipo de trabajo es más numeroso.
Tu puesto de trabajo es bastante técnico, no requiere que hables en público, pero de vez en cuando, debes dar un curso de formación sobre el programa con el que trabajas a clientes o compañeros.
Has tenido una buena idea para mejorar un aspecto de tu trabajo, a tu jefe le ha gustado tanto que te ha “invitado” a asistir a la reunión de la junta directiva para que les cuentes de primera mano tu propuesta.
Siempre has tenido inquietudes sociales y te has movido en círculos políticos. Se acercan las elecciones municipales y te han propuesto ir en las listas del partido. Tendrás que participar en debates y dar pequeños mítines.
Después de años de trabajo te has convertido en un experto, se podría decir que tu cerrera es brillante, hablas en público habitualmente y haces presentaciones de alto nivel, pero eres absolutamente incapaz de ponerte delante del público si no te has tomado una pastilla de sumial.
Si has vivido alguna de las situaciones anteriores, o similares, seguramente hayas sentido cierta inquietud o temor a la hora de afrontarlas por primera vez, pero, más allá de ese respeto inicial, lo resolviste satisfactoriamente y ahora este tipo de situaciones no son un problema para ti. No tienes miedo a hablar en público.
Si no te sientes identificado con el párrafo anterior, quizá sí lo hagas con las líneas siguientes.
Cuando preguntamos a las personas que asisten a nuestros talleres para superar el miedo a hablar en público qué les ocurre cuando hablan en público o cuando anticipan que tienen que hacerlo, nos cuentan todo lo que verás a continuación.
¿Qué te ocurre cuando hablas en público o cuando anticipas que tienes que hacerlo?
Hemos organizado las respuestas de las personas en 3 grupos: qué ocurre en tu cuerpo cuando hablas en público, qué ocurre en tu mente y qué haces cuando hablas en público.
¿Qué ocurre en mi cuerpo cuando hablo en público?
- Se me acelera el corazón, tengo taquicardia o palpitaciones.
- Mi respiración se hace más difícil. A veces me parece que me falta el aire o incluso puedo sentir un poco de mareo.
- Me tiembla la voz o me quedo casi sin ella.
- Noto mucha tensión en general y me pueden temblar las manos o las piernas.
- Sudo en exceso.
- Se me seca la boca y me cuesta hablar con claridad.
- Noto calor y me pongo colorado, me ruborizo.
- Siento molestias en el estómago o incluso náuseas.
¿Qué ocurre en mi mente, que suelo pensar cuando hablo en público?
- Si hablo haré el ridículo.
- Estaré tan nervioso que diré cosas sin sentido o no podré continuar con la presentación.
- Todos van a notar mis nervios y pensarán que no estoy preparado.
- Van a pensar que no estoy a la altura, que no soy un buen profesional.
- Me quedaré en blanco, bloqueado, sin saber qué decir, pensarán que soy tonto.
- Me pondré roja y todo el mundo se dará cuenta.
- Me temblará la voz, todos lo notarán, será horrible.
- Me harán preguntas que no sabré contestar.
- Esto no debería pasarme a estas alturas. No valgo para esto.
¿Qué hago cuando tengo que hablar en público?
- Evitar la situación si tengo la oportunidad. Para pasarlo tan mal y jugármela.
- Si no tengo más remedio que hablar en público, me tranquiliza hacerlo con alguien al lado que en un momento pueda continuar si tengo dificultades.
- Procuro no mirar al público, mirando a menudo a mi pantalla, si la tengo, o mirando solo a las personas que me dan seguridad, evitando el contacto directo con los que más me puedan incomodar.
- Hablo bastante rápido, apenas hago pausas, y me cuesta subir el volumen. Intento terminar lo antes posible.
- No me extiendo en las explicaciones, intento decirlo todo, pero sin pensar demasiado en lo que estoy contando. Cuanto menos tiempo esté en esta situación, menos probabilidades de hacer el ridículo.
- Intento estar fuera del foco de atención, para ello suelo sentarme o colocarse en un lugar donde no se me vea mucho. Prefiero que el público mire a la pantalla o a cualquier sitio menos a mí.
- Me escribo la presentación en un papel para poder leerla si lo necesito, Lleno la diapositiva del Power Point con el texto por si me quedo en blanco poder continuar.
- Ensayo y repaso una y otra vez mi presentación, incluso llegando a memorizar el contenido. Quiero asegurarme de que no me voy a bloquear y que la ansiedad no me va a llevar a decir cosas sin sentido.
- Si el miedo es muy intenso, tomo algún tipo de medicación (sumial o algún tranquilizante) o alguna infusión que me ayude a calmarme.
- Durante el tiempo que estoy hablando estoy en alerta permanente vigilando y evaluando cada palabra que digo y como me estoy expresando.
- En caso de que mi intervención sea online, prefiero hablar con la cámara apagada, no ver a mis interlocutores, incluso, en alguna ocasión, interrumpir voluntariamente la conexión, fingiendo que ha sido un fallo de la red. De esa manera puedo recuperar el control de la situación.
Curso para perder el miedo a hablar en público
El miedo a hablar en público es algo muy común. Cuando estamos frente a una audiencia, nos sentimos expuestos al juicio de los demás.
Es normal sentirse nervioso al hablar en público porque nos ayuda a prepararnos para la tarea, pero el problema es que el miedo es tan fuerte que en ocasiones nos paraliza o nos hace incapaces de evitar tenerlo.
Nuestro curso para superar el miedo a hablar en público, desarrollado por la Universidad Autónoma de Madrid, te dará las claves para superar tu miedo.
Te brindará las estrategias que necesitas para reducir la ansiedad antes y durante tu presentación y mejorar la seguridad y la calidad de tu intervención. Aprenderás a hablar en público y disfrutarás de la experiencia.
En Grupo XXI Psicología llevamos impartiendo el curso para superar el miedo a hablar en público desde hace 22 años y hemos ayudado a más de 900 personas. Apúntate ya a nuestro curso presencial o a través de videollamada en directo, tú eliges.